Antes de esta clase, había tomado otra “clase de arte” en español y dimos un paseo mural por Eugene. Fue hermoso. Me encantó. Pero nuestra clase era tan amplia que nunca profundizamos en ningún artista o mural en general. Solo rozamos la superficie.
Aprender sobre Orozco fue interesante y emocionante para mí. Apenas sabía quién era antes de esta semana y experimentar su arte era como conocer a un nuevo Diego Rivera, uno que no era tan publicitado. He aprendido muchas veces las mismas cosas sobre Diego Rivera, fue muy repetitivo. Pero esta vez me concentré más en el arte y, lo que es más importante, en el arte de las personas que lo rodean, como los otros miembros de los “tres grandes”. Lo que inicialmente me atrajo a Orozco fue la lectura “New World, New races, New Art”. Me gustó mucho este artículo porque era fácil de leer y tenía sentido, Orozco utiliza una metáfora muy vívida que agrega claridad muy necesaria a sus ideas innovadoras. La metáfora que usa es comparar e imaginar cómo sería si Manhattan, Nueva York, copiara la arquitectura de los antiguos egipcios y tuviera pirámides allí en lugar de los infames rascacielos de Nueva York. Aunque todavía sería indudablemente bonito y sorprendente, el público / resto del mundo no tendría la misma fascinación con la ciudad, y en cambio iría a visitar las pirámides originales en Egipto. Como la séptima ciudad más visitada del mundo, la ciudad de Nueva York recibe mucha atención, y estoy de acuerdo con Orozco, no creo que sería así si fuera una copia de otra cosa, no importa cuán agradable sea Copiar. Esta metáfora realmente me permitió dejar que se hundiera lo que Orozco decía, donde podía imaginarlo y decidir si quería escuchar lo que decía o no.
Mi mural favorito de Orozco que he visto hasta ahora es su “Prometeo” que está en el Colegio Pomona. Mi papá fue al Colegio Pomona en el sur de California, mudándose fuera del estado de Oregón para ir allí. Siempre pensé mucho en Pomona porque sacó a mi padre del estado y comenzó su carrera, más tarde en California conoció a mi madre, y así sucesivamente. Prometeo es el primer mural importante de Orozco cuando salió de México para dedicarse al arte mexicano en los Estados Unidos. El espacio donde se pinta “Prometeo” es perfecto, la arquitectura juega en el mural muy suavemente. Las paredes comienzan a derrumbarse cuando Prometeo intenta evitar que el techo y las paredes se derrumben. Detrás de él, de pie, agazapado y cayendo, hay docenas de personas que intentan sobrevivir y no ser aplastadas por el debilitamiento del interior. Si no sabes quién es Prometeo, es un titán de la mitología griega, una figura que representa un campeón de la humanidad. Su historia es que robó el fuego de los dioses y se lo dio a los humanos / mortales. Aquí es donde se vuelve moderadamente político … Orozco puede representar con precisión a México, junto con muchos otros países en ese momento en este mural. Muchos civiles han luchado para salir de las malas situaciones en las que otros gobiernos y dictadores los habían metido. Especialmente en México, acababan de salir de una dictadura autoritaria y estaban en camino a la autosuficiencia y a aprender de los errores del pasado.