Mel Casas es un artista que lucha por la representación de la comunidad Chicana en el mundo del arte en los Estados Unidos. Sus perspectivas son únicas e importantes para los Estados Unidos, pues tratan de la identidad y la manera en la cual la cultura Chicana ha sido trivializada a través de la historia. Casas usa la sátira y la parodia para resaltar estos elementos en obras de dimensiones gigantes, para así crear un impacto en los observadores.

Es interesante ver como Casas se burla de los estereotipos que existen con respecto a los Chicanos en los Estados Unidos. Temas de sexualidad, política, etnicidad y discriminación son las que Casas pone en una nueva perspectiva. Pero vale la pena preguntarse si los espectadores podrán entender estos elementos en la obra y si se sentirán motivados para cambiar sus formas de ver la comunidad Chicana como también la cultura dominante de los Estados Unidos.

Cambiar las percepciones de belleza, cultura, etnicidad y política de una cultura dominante es una meta difícil de lograr. Sin embargo, se puede empezar a crear este cambio a través del arte, las protestas, y otras formas menos convencionales de expresión. El arte que subvierte las normas convencionales y hace que la gente se cuestione es efectivo porque empieza a cambiar las ideas más populares sobre muchos temas.

¿Como hacer para que se vea más el arte Latinoamericano, en espacios populares? Es una pregunta que se puede responder de varias maneras, pero cabe resaltar que es posible si hay suficiente apoyo. Es una iniciativa que todos los consumidores deben tomar con respecto al arte y a los productos que consumen todos los días. Si las personas comunes apoyan el arte menos convencional a través de sus ingresos, su tiempo, y su voz, tomara un lugar más importante. A veces hay que hacer el esfuerzo para encontrar el arte diferente y menos conocido, pero vale la pena, pues nos da nuevas enseñanzas con respecto al mundo. Todos podemos poner nuestra parte para generar este respeto por el arte.